A ser humildes y evitar la soberbia, exhorta Diócesis de Tabasco a feligreses
Hay que buscar el servicio a los demás, la santidad y la justicia, comentó
- Andrés Olmos
- Agosto 31, 2025 - 08:45 p.m.
- TABASCO

A ser humildes y no soberbios, exhortó el obispo de Tabasco, monseñor Gerardo de Jesús Rojas López, a la feligresía católica, al precisar que la humildad no siempre se basa en las cosas materiales, sino en estar apegados a Jesucristo.
Tras reflexionar el Evangelio de San Lucas, en el pasaje del Banquete de Bodas, comentó que, con modestia, hay que buscar los últimos lugares, es decir, el servicio a los demás, así como la santidad y la justicia.
"¿Qué es la humildad? Puede ser que coloquialmente podamos decir que hay una persona muy humilde, porque no tiene dinero, porque no tiene casa, no es exactamente así. Puede ser que una persona muy rica sea muy humilde y una persona muy pobre sea muy soberbia. La humildad no consiste en las cosas materiales que se tenga. La humildad consiste en estar unido a Cristo Jesús, apegado a Cristo Jesús y donde está Jesús, está aquel que es humilde. Si somos humildes, donde está Cristo, ahí estaremos nosotros ¿Dónde está Cristo Jesús? Según la parábola de hoy, en el último lugar, en el lugar donde se sirve, en el lugar donde se da, en el lugar donde se perdona, en el lugar donde se es sincero, se busca la verdad, la santidad y la justicia", señaló.
Rojas López, recordó las palabras de un sacerdote, que comparó la soberbia con una enfermedad mental, al mencionar que el soberbio se "desprende de la realidad".
"En una ocasión oí decir a un sacerdote, la humildad, la comparaba con una enfermedad mental, con una demencia, con una locura en sentido patológico, psicológico ¿Qué es una locura? El que se desprende de la realidad y el soberbio, el que no es humilde, así es, se desprende de la realidad, de lo que no es. El soberbio se tasa muy alto, se siente superior, se cree distinto y a los demás los ve inferiores y es muy grave", abundó.
En este sentido, retomando la voz de San Ignacio de Loyola, indicó los momentos o tipos de humildad que hay, de acuerdo con el fundador de la Compañía de Jesús.
"Uno de los santos de la Iglesia, hablando de la espiritualidad, San Ignacio de Loyola, clasificaba la humildad en tres momentos: Primero, el que busca la salvación, el que busca salvarse, es aquel que huye del pecado y entre ellos la soberbia, la envidia, el orgullo, la vanidad. El segundo es el que busca la perfección, aquel que huye aún de los pecados que llamamos veniales, cuando se lastima y se da cuando no llega a ser mortal el pecado, pero busca la perfección, es decir, busca asemejarse a Dios; y el tercer grado decía él, es el amor pleno, el amor puro, cuando se busca el hacer el bien total a los demás con un don gratuito, con un don generoso, con un don sin recibir nada cambio", apuntó.
Short Link: https://is.gd/FWHMqd
Comentarios