Familiares de joven asesinado por policías en Lerdo, Veracruz corren a Nahle de mitin

La morenista se negó al encuentro con los ciudadanos, con el argumento de no politizar el tema

• Diana Frías
• Abril 08, 2024 - 08:59 p.m.
• POLÍTICA

Familiares de Brando Arellano, joven asesinado por policías en el municipio de Lerdo, Veracruz, corrieron a la candidata a la gubernatura de Veracruz, Rocío Nahle García. 

Los hechos ocurrieron durante un mitin en esa localidad, luego que la abanderada de Morena trató de dialogar con la madre de la víctima, muerto el pasado 19 de enero. 

Aunque la extitular de la Secretaría de Energía había accedido a conversar con Erika María Cruz, la madre del joven, esta rechazó ir sola, ya que quería tener el acompañamiento de otros habitantes. 

Ante ello, Nahle García se negó al encuentro con los ciudadanos, con el argumento de no politizar el tema.

Sin embargo, esa postura molestó a los familiares de Brando Arellano, quienes comenzaron a ahuyentarla, al sentenciarle que no querían "gente corrupta" en Lerdo.

La madre del joven incluso comenzó a gritar que la candidata no quiso hablar con ella, y la multitud le exigió: "fuera" y "justicia para Brando".

"-Este tema yo no quiero politizar, o ya es bastante para ella. Así es. -Entonces no es politizar, hablo con usted, si usted me permite, termino el mitin y vamos con usted. –Nos vamos ya. –Está bien, nos vamos, pero es usted nada más. –Aquí estamos, somos Lerdo. –No, es con usted. –Bueno, entonces, señora, no tenemos nada que hablar. –Somos Lerdo. -Por eso no vamos a votar por usted. Por eso, porque en Lerdo no queremos gente corrupta. –No nos quieren escuchar. -Queremos justicia para Brandon, tenemos, tenemos una improvisada. Corruptos. –La candidata no quiso hablar conmigo. -Fuera de Lerdo, fuera de Veracruz. Justicia para Brando, justicia para Brando", sentenció. 

Esta es la segunda ocasión en lo que va de la campaña en que Nahle García es abucheada por ciudadanos, ya que la vez anterior ocurrió en el café La Parroquia, en Boca del Río, donde le pidieron a gritos que abandonara el lugar.